Durante mi adolescencia tuve unas amistades tóxicas y dañinas . En ese momento no fui capaz de verlo, pensaba que era algo normal en esa edad y que tenía que "aguantarlo" para tener su "amor y aprobación" , aunque me iba sintiendo cada vez peor y más pequeña cuando me relacionaba con ellas.

Después de unos años, cuando acabé la carrera de farmacia y empecé a trabajar, me di cuenta de que no me podía expresar o comunicar de la forma que yo deseaba. Tenía tanto que decir, expresar y aportar, y tantas ganas de evolucionar y crecer personal y profesionalmente, pero tantos bloqueos que me lo impedían, que esto me generaba un malestar y un agotamiento enorme. Relacionarme con los demás me suponía quedarme completamente exhausta y además sentía que lo que decía o cómo me comportaba, no iba alineado a mis valores, mi forma de ser o ver las cosas, y con mis deseos, lo que me generaba más tensiones y malestar.

Adicionalmente en ese momento estaba en una relación de pareja que no me hacía feliz y donde sentía que allí no podía desplegar mis alas y crecer. No sabía exactamente qué es lo que no me estaba funcionando en mi vida, pero tenía claro que mi malestar y mis fracasos en las relaciones, era señal de que algo no estaba funcionando.

Yo quería comunicarme de manera fluida, expresando mis necesidades y deseos, estableciendo límites, priorizándome delante de los deseos de los demás y sin importarme tanto su opinión. También deseaba tener una pareja sana con la que compartir la vida y que me aportara felicidad y bienestar, pero me estaba encontrando muchas piedras en el camino que me lo impedían.

Considero que siempre he tenido las cosas más o menos claras y me gusta tener el poder de mi vida o sentir que tomo mis decisiones acordes a lo que yo quiero, pero me sentía incapaz de trasladarlo al terreno real y esto me hacía experimentar una sensación de vacío que intentaba compensar en la relación de pareja, dejando mi bienestar en manos o al poder de otras personas, algo muy peligroso y perjudicial para la salud y el bienestar emocional.

Llegó el momento en que debido al sufrimiento , mi personalidad muy analítica y observadora, mis ganas de superarme y de conseguir mis objetivos ( siempre he sido muy cabezona cuando se me pone algo en la cabeza y no paro hasta que lo consigo), empecé un proceso profundo de introspección, buscando mucha información, leyendo, escuchando podcast sobre psicología , desarrollo humano y relaciones de pareja , haciendo cursos y dejándome guiar y formar por expertos en el sector de las relaciones de pareja y del desarrollo personal, como la Sílvia Congost y mi coach Josep Cussó (creador del Círculo de la Autoexpresión), a los que estoy enormemente agradecida y a los que supieron poner mucha luz a lo que me estaba pasando.

Ahora me encuentro en momento que me ilusiona mucho compartir y divulgar todo lo que he aprendido hasta ahora, para aportar luz a personas que se encuentren en una situación parecida. Sin embargo, reconozco que a mis 35 años, todavía me queda mucho por aprender, al fin y al cabo, pienso que mientras estemos vivos, seguiremos aprendiendo, o eso espero 😊.

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